Seguro que a tus peques les encanta ponerse las botas de agua cuando llueve, ya sea para jugar en la lluvia, saltar o correr hasta ponerse perdidos. El problema es que sus botas se ensucian y, si no se mantienen de forma adecuada, se estropean antes de la cuenta. Y es que, la humedad y el barro deforman en ocasiones las botas de agua cuando estas no se cuidan. Para que no ocurra esto, en DCOLORES te ayudamos a evitar este problema. Queremos que tus botas duren lo máximo posible, así que te traemos los mejores trucos para conservar tus botas de agua.
A los más pequeños les encantan las botas de agua, ¡están deseando sacarlas del armario! Pero que sean impermeables no significa que sean irrompibles, necesitan un cuidado como cualquier otro tipo de calzado. Así que, como padres tenemos que estar pendientes de tenerlas lo mejor posible para que no pierdan la sonrisa en esos días tan especiales para ellos. La acumulación de barro puede ayudar a la proliferación de bacterias y hongos, e incluso al desgaste adelantado de las botas de agua. Por eso es tan importante cuidarlas.
Puede parecer difícil pero en realidad es muy sencillo limpiar las botas de agua. Te damos los mejores truquitos para que los esfuerzos den resultado:
Si las botas tienen un olor desagradable a causa de la humedad, el barro u otras razones, el bicarbonato de sodio es lo mejor que puedes usar. Lo único que tienes que hacer es coger un poco de bicarbonato e introducirlo dentro del calzado durante unas horas para que ocurra la magia. El bicarbonato de sodio se encarga de absorber la humedad, por lo que sólo tendrás que coger un trapo seco horas más tarde y retirarlo con cuidado. ¡Recuerda tener las botas fuera del alcance de los más pequeños!
Si los niños han estado chapoteando en los charcos de barro y se ha colado la suficiente agua como para tener un olor desagradable tras su uso, sólo tienes que coger una bolsa de té para eliminar este mal olor. Recomendamos dejar la bolsa durante toda la noche en el interior del calzado. No soluciona simplemente el mal olor, sino que además reduce la humedad acumulada.
Para que las botas no se deformen a causa de la humedad y se elimine parte del olor, lo mejor que puedes hacer es coger un poco de papel absorbente e introducirlo en el interior del calzado. Recomendamos también quitar la humedad de fuera con el papel. Después, déjalas secar durante el tiempo que sea necesario y estarán como nuevas.
Los aceites esenciales son perfectos para deshacerse de las bacterias. Además, desprenden un olor natural que combate con los malos olores. Deja las superficies del exterior brillantes y relucientes como si fueran recién compradas.
La suciedad más visible y adherida a las botas de agua es complicada de retirar en ocasiones. Sólo necesitas un poco de paciencia y un buen paño o esponja. No es necesario emplear químicos para limpiar las botas de agua, de hecho suelen estropearlas y aceleran el proceso de deterioro de estas. La esponja puede además absorber con más facilidad la humedad de los rincones que son menos accesibles.
Como hemos dicho, puedes hacer desaparecer el mal olor de las botas de agua usando aceites esenciales, bicarbonato de sodio, bolsas de té y papel absorbente. Lo mejor es que combines dos de estos remedios para asegurarte del todo de que las botas de agua de tus pequeños no vuelvan a suponer un problema.
Dependiendo de si vamos a limpiar el exterior o el interior de las botas de los pequeños, debemos seguir una serie de pasos para que sea más sencillo deshacernos de cualquier tipo de suciedad.
Lo primero que tenemos que hacer en este caso es coger o bien una esponja o bien un trapo, humedecerlo y comenzar a frotar de forma suave la suciedad para retirarla. Si ves que es imposible retirar la suciedad, ¡no uses químicos! Es preferible añadir jabón o diluir vinagre en agua para limpiar el barro incrustado. Si quieres darle un buen olor a tus botas de agua, usa aceites esenciales para dejarlas brillantes y con un gran aroma.
Para limpiar el interior, es preferible coger un poco de papel absorbente para retirar el exceso de humedad. Si quieres un acabado perfecto, el siguiente paso es retirar la humedad con una esponja o trapo seco con algo más de atención para quitar de las puntas de las botas de agua lo que quede. Incluso, si ves que la humedad ha traspasado demasiado, recurre al bicarbonato de sodio y déjalas reposar. Tras esto, puedes escoger el método que quieras de los que hemos hablado para darles un buen olor.
Para poder conservar durante más tiempo y en buen estado las botas de agua, es recomendable limpiarlas después de cada uso. De esta forma, evitas que vayan acumulando humedad, malos olores y bacterias por completo. También es importante que las almacenes en un lugar en el que estén protegidas de la humedad, para que su resistencia a esta sea más fuerte a la hora de sacarlas a la calle.
Las botas de agua suelen durar dependiendo del material, la calidad, la frecuencia de uso y sobre todo del cuidado. Por lo que, si quieres unas buenas botas de agua para los pequeños no sólo basta con comprar las mejores, también tienes que darles el mantenimiento necesario.
En COLORES queremos que tus niños corran, jueguen y salten sin problema durante los días de lluvia. Para ello, contamos con las mejores botas de agua. Esperamos que estos consejos te ayuden a alargar la vida de tus botas de agua y, si aún no las tienes, te esperamos en nuestras zapaterías en Sevilla.
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